La puntualidad en la entrevista de trabajo es un tema que puede parecer obvio, pero que genera muchas dudas a la hora de la verdad y que puede derrumbar toda nuestra preparación para la entrevista. En este post, hablaré del tiempo que he de llegar con antelación a la entrevista y de otras consideraciones importantes de esos instantes previos. Antes que nada, pensad: ¿cuándo he de llegar al lugar de la entrevista? ¿a la hora en punto? ¿5 minutos antes? ¿3?, ¿10? A ver si la respuesta coincide con mi punto de vista y si es el mismo que al principio del post.

¡Ah! Al final del post os explico una historia personal relacionada con la puntualidad en la entrevista que me ha ocurrido el mes pasado y que puede ser un buen ejemplo de lo que puede pasar de camino a una entrevista de trabajo.

¿Qué pasa si llegas tarde a una entrevista de trabajo?

 

Lo que es seguro que no hemos de hacer, es llegar tarde. La falta de puntualidad en la entrevista da muy mala imagen del candidato. Denota desorganización, no consciencia de lo importante que es o poca motivación. Si ha sucedido un imprevisto y creemos que vamos a llegar tarde, hemos de avisar con antelación y no justo 5 minutos antes de la hora acordada. Es mejor que no suceda, pero si ocurre, podemos arreglarlo un poco avisando con tiempo. Si no, podemos generar alguna molestia al entrevistador, lo que puede afectar negativamente a su consideración sobre nuestra candidatura.causas-llegar-tarde-4

A veces no hacemos esta llamada con antelación porque pensamos que aún podemos llegar a tiempo o que sólo nos retrasamos 5 minutos y no pasa nada. Es mejor llamar en cuanto se cree que se puede llegar tarde. Si es media hora antes, mejor. ¿Por qué? Porque el entrevistador puede organizarse: puede que haga pasar primero a alguien que está esperando, o que haga una tarea que no la estaba haciendo porque pensaba que la dejaría a medias, o que desayune antes… Incluso puede pasar que nos diga que no pasa nada, que gracias por avisar, y de esta manera nos tranquiliza.

En esta llamada se ha de dar el motivo (justificado), se calcula el tiempo que se tardará y se emite una disculpa. El entrevistador ya informará si cambia la hora o no.

 

¿Cuándo he de llegar a una entrevista de trabajo?

 

Pero esto si se da el caso de no tener puntualidad en la entrevista. ¿Qué es llegar con puntualidad? Hay quien me ha dicho que la puntualidad es llegar justo a la hora. Hemos de considerar que a veces entramos en una empresa y nos encontramos con una recepción donde puede ser que estén atendiendo a alguien o que no haya nadie en estos momentos, por lo que nos toca esperar y puede que el entrevistador sepa de nosotros 5 minutos más tarde de la hora acordada. Por lo que, a sus ojos, puede que no hayamos sido puntuales.

Por este motivo, no creo que sea positivo llegar justo a la hora en una entrevista de trabajo. Tener puntualidad en la entrevista de trabajo es llegar antes, para poder solventar estas esperas en recepción o recorridos internos por la empresa hasta que damos con la persona que nos va a entrevistar.

Imaginad que nos entrevistan en un edificio de oficinas de diversas empresas. La llegada a recepción implica que llegas a la recepción de ese conjunto de empresas, no a la empresa a la que has de hacer la entrevista. De hecho, es posible que, cuando llegues a planta, te encuentres con una nueva recepción. Igual pasa en un hospital o en empresas con diversas naves. Llegas a un lugar que no es en especial el acordado y que puede ser que no avisen a la persona con la que te has de entrevistar, si no que te digan a dónde te has de dirigir. En un hospital te pueden decir que la oficina de RRHH está en la última planta… sumad minutos. En una empresa con diversas naves o entradas te pueden indicar que la entrada a las oficinas es por la parte trasera del edificio… Sumad minutos.

Cuando en la preparación de la entrevista miramos información de la empresa, hemos de mirar también cómo llegar y conseguir imágenes de la misma, para hacernos una idea.

No confiad plenamente en el Google Maps u otras aplicaciones que os indican el tiempo que tardáis en llegar a un lugar. Están muy bien, pero a veces hacemos el cálculo el día anterior en otro horario que no es el del día que vamos a la entrevista y puede salir un resultado bien distinto. Se puede programar para simular cuanto se tardará en el día y hora concreto de la entrevista, pero es una aproximación. Si después hay una avería de un coche o un retraso del tren (sí, ya sé que esto aquí no pasa casi ;-)), no servirá de nada lo que ha calculado. A lo que indican estas aplicaciones, sumémosle 20-30 minutos.

No llegar con puntualidad a la entrevista de trabajo implica más nervios, más inseguridad, menor autocontrol, más imprecisión… lo que, evidentemente, puede afectar al trascurso de la entrevista.

 

¿Y si llegamos mucho antes a la entrevista de trabajo?

 

Hay quien llega 15 minutos antes a la empresa. O sea, a la recepción. Lo encuentro demasiado. Puede parecer que estemos ansiosos o que seamos muy autoexigentes. Además, nos puede influir negativamente en el transcurso de la entrevista. ¿Por qué? Como dice el dicho: “quien espera, desespera”. Y así es. Nosotros hemos de ser puntuales, pero a veces, quien entrevista no nos atiende a la hora acordada (a veces de forma justificada, por alguien que ha llegado tarde a la entrevista anterior, por ejemplo, o porque una entrevista, simplemente, se ha alargado más por algún tema de interés; pero a veces no está justificada). Si esto ocurre, nos podemos ir poniendo más y más nerviosos para la entrevista. Incluso puede surgirnos un sentimiento de justicia y de rebeldía (“yo he llegado a mi hora, ¿por qué no me atienden?). Esta sensación de falta de respeto y este nerviosismo no ayuda a hacer la entrevista. Mi consejo es que pensemos en positivo. Pensemos que si no nos están haciendo la entrevista es por algún motivo justificado. Nos irá mejor.

Nos puede ayudar llevar un diario o un libro, o leer algún documento que esté en recepción que además nos puede dar información interesante. Mirar el móvil, también, pero sin sonido ni insistentemente.

Hemos de tener en cuenta que en la recepción ya pueden tomar nota de nuestro comportamiento. Siempre que he hecho entrevistas y he tenido la posibilidad de preguntar en recepción, me han llegado a dar informaciones muy valiosas sobre los candidatos. Desde quejas que han formulado y que puede ser que a mí no, a comportamientos molestos, aunque la mayoría de veces, los comportamientos han sido adecuados.

Por lo tanto, aconsejo llegar con antelación a la zona de la entrevista. 20-30 minutos antes. Dar una vuelta. Estudiar el lugar. Ver que nos inspira. Ver la entrada. No aconsejo tomar nada en estos minutos anteriores. En un despacho pequeño, los olores se perciben mucho, hasta el café. Ya ni hablar del tabaco. Si se hace, puede ser aconsejable pasar por un lavabo para anular estos olores. Hago hincapié en los olores, por pequeños que sean, porque es algo muy visceral y, en un pequeño despacho pueden ser molestos si no le gustan a quien entrevista. Y le hemos de despertar sensaciones positivas… Aunque sé que va más allá, esto que estoy diciendo, de la validez o no de un candidato, no lo dejaría pasar por alto. Todo el mundo tiene sensaciones, emociones… Mejor generar las positivas.

Por tanto, aconsejo llegar a la zona 20-30 minutos antes y entrar a la empresa unos 5 minutos antes, a no ser que sea un caso especial, como los explicados antes de hospitales o edificios de empresas, que podemos entrar 7-8 minutos antes porque sabemos que hemos de hacer un recorrido dentro de la empresa.

 

Experiencia personal sobre puntualidad en la entrevista de trabajo

 

Espero que os haya sido de utilidad y ahora os explico una experiencia personal sobre la puntualidad en la entrevista que me ocurrió el mes pasado:

Tenía que llevar a mi hija a una visita médica y estaba en mi ciudad conduciendo. Era hora de salida del colegio, por lo que había mucho tráfico. Estaba detrás de un coche esperando entrar en una rotonda, De repente veo que el coche de adelante entra en la rotonda y yo, después de mirar a la izquierda para ver si venía alguno, decido entrar en ella. Pero no pude, porque el coche que había entrado había frenado en seco y choqué con él. Nada grave. Ni un rasguño. Yo sabía que era culpa mía porque el golpe era por detrás, a pesar de la frenada en seco que no me dio tiempo a reaccionar. Miré si mi hija estaba bien y estaba perfecta. Entonces veo que viene una mujer algo alterada y bajo la ventanilla, Era la mujer que conducía el coche de delante. Y me dijo:

“¡Perdona, perdona! Es que me he asustado. He visto un coche que iba rápido dentro de la rotonda y he frenado en seco”. Yo le comenté que no pasaba nada. Que aparcáramos y mirásemos si había algún daño en algún coche. No había nada. Ella estaba muy nerviosa y me dijo que era porque tenía una entrevista y había salido tarde. Le pregunté si había llamado a la empresa y me dijo que no. Estaba nerviosa y sólo podía pensar que llegaba tarde. Le comenté que se calmase, que no había pasado nada y que llamase a la empresa diciendo que había tenido un golpe con el coche, que estaba bien y que ahora iba para allá. Pero ella estaba nerviosa. Entró en el coche y se fue.

Lo entiendo. Hoy día, hay personas que les es muy importante conseguir un trabajo. Pero hemos de calmarnos y controlar los posibles sucesos imprevisibles que nos puedan suceder, porque no cumplir con la puntualidad en la entrevista nos puede expulsar del proceso de selección, o bien por la mala imagen, o bien porque sabemos que es mala imagen y perdemos confianza y seguridad.

Espero que le fuera bien la entrevista. Y ya sabéis,la puntualidad en la entrevista de trabajo es innegociable.

Un saludo y si os ha gustado o tenéis algún amigo/a impuntual, ¡compartid!

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