¿Cómo puedo saber cómo ha ido la entrevista? ¿Cuántas veces salimos de una entrevista sin saber cómo ha ido? ¿O creemos que ha ido bien y no somos finalmente el candidato escogido? ¿O viceversa?
Hemos escuchado en ocasiones que, después de la entrevista, hemos de analizar cómo lo hemos hecho, pero raramente realizamos este análisis de forma exhausta. De hecho, no solemos tener una guía de qué hemos de revisar después. Y revisar cómo ha ido es importante para no cometer, en la siguiente entrevista, los errores que hemos cometido en ésta.
Cómo saber si una entrevista ha ido bien
Primero, hemos de tener en cuenta que revisar la entrevista realizada nos permite preparar la siguiente y que servirá más para esto que para tener una idea clara de cómo ha ido.
Por norma, cuando las sensaciones son buenas, suele querer decir que la entrevista ha ido bien, pero no es 100% seguro que seamos el candidato escogido. No hemos estado en entrevistas de otros candidatos y puede que haya otro que la empresa considere más idóneo que nosotros.
Al contrario pasa menos, pero puede pasar. A veces la entrevista no nos parece que haya ido bien, pero nos contratan. Esto puede ocurrir cuando estamos delante de un entrevistador que da poco juego, severo, directo y que no da a entender con sus gestos que la cosa vaya bien. Pero es un estilo de entrevistador.
Sabiendo que hay muchos factores que inciden en la selección del candidato, ¿en qué podemos fijarnos para hacer la evaluación?
Análisis de la entrevista
La metodología que yo propongo es la siguiente.
Empecemos el análisis en el camino de vuelta a casa, no dejemos pasar mucho tiempo porque la memoria puede fallar. Hagamos el análisis lineal. Desde que hemos salido de casa (¿hemos salido tarde? ¿Nos ha afectado la ansiedad por no llegar?) hasta que hemos llegado a la entrevista (¿Qué ha pasado en la recepción? ¿Hemos llegado tranquilos? Si no es así, ¿por qué? ¿Qué ha pasado para ponernos nerviosos de cara a la entrevista?
A veces, tenemos más ansiedad en una entrevista que en nuestro día a día, pero pueden pasar cosas que nos pongan más nerviosos (la llamada de un familiar, problemas con el transporte, nos han dicho que hemos sido descartados para una oferta que nos interesaba, de camino a la entrevista, o hemos pensado en demasía en otras entrevistas que no han ido bien, aumentando nuestra ansiedad) y hasta el final de la misma (¿Qué preguntas nos han hecho? ¿En cuál nos hemos encallado? ¿En qué momento nos hemos sentido más inseguros? ¿Nos hemos sentido cómodos con la comunicación no verbal o la hemos tenido demasiado en cuenta? ¿Hay algo del entrevistador que nos haya puesto nervioso?).
Pensemos en lo que ha pasado paso por paso. Intentemos detectar nuestros pensamientos ante cada suceso de la entrevista. Y pensarlo linealmente hace más fácil el acceso a esta información. Por eso no podemos dejar pasar mucho tiempo desde que se ha hecho la entrevista.
Algunas de las preguntas que podemos hacernos que pueden ayudar a analizar la entrevista, a parte de las que he comentado, son:
- Antes de llegar a la entrevista:
¿He organizado bien el trayecto?
¿Me he avanzado a posibles imprevistos?
¿Ha habido algún factor inesperado que me ha generado ansiedad?
¿Mi actitud ha sido la correcta o he tenido pensamientos sobre la entrevista y mis posibilidades que me han afectado después?
¿He repasado el CV y la oferta de camino a la entrevista? En caso afirmativo, ¿me ha ayudado o no?
¿Hay algún hecho que me haya influenciado, positiva o negativamente, para la entrevista?
¿Me he equivocado a la hora de apuntar la dirección?
- Sala de espera- llegada a la empresa
En caso de que haya habido tiempo de espera extra, ¿me ha afectado?
¿Recordaba el nombre del entrevistador?
¿Ha pasado algo en la sala de espera que me haya incomodado?
- Saludo con el entrevistador y primer minuto
¿Ha sido correcto el choque de manos? En caso que no lo haya sido, ¿me ha afectado?
¿Qué sensación me ha dado de entrada el entrevistador?
Mi actitud de entrada, ¿cómo ha sido? ¿Enérgica? ¿Dubitativa? ¿A la expectativa? ¿Por qué? (Recordemos que la seguridad en uno mismo y en su trabajo, es básica. En los primeros momentos, ya hemos de tener el “traje de trabajador seguro” puesto. Si no, puede afectar a la sensación primera que tenga el entrevistador)
¿Me he sentido cómodo en la silla? ¿He adquirido una posición correcta? (Importante para afrontar bien la entrevista).
¿Me he avanzado a alguna indicación del entrevistador?
- Durante la entrevista
¿Qué preguntas, una por una, me ha hecho el entrevistador? ¿Me he sentido cómodo con las preguntas?
¿Me he dejado alguna pregunta por hacer?
¿Mi comunicación ha sido clara?
¿Le he explicado aquello que quería?
¿He resuelto situaciones/preguntas imprevistas? ¿Qué preguntas han sido las que me han generado dudas o no he sabido responder o venderme bien? (Las hemos de anotar para preparárnoslas para la siguiente entrevista).
La comunicación no verbal, ¿ha sido correcta? ¿Y la verbal?
¿He usado mucho entradas a frase como “eeeh”, “pues…”? (Demuestran, en un uso continuado, inseguridad o desconocimiento del propio CV o de la profesión).
¿He tardado en responder alguna pregunta?
¿Me he despistado durante la entrevista y no he escuchado en algún momento al entrevistador?
¿Qué tipo de entrevistador era? ¿Agresivo, facilitador, directo…? ¿Me ha ayudado o me ha ido en contra? ¿Qué creo que debería hacer en la siguiente entrevista?
- Momento final de la entrevista
La despedida, ¿ha sido correcta o he tenido alguna actitud de incertidumbre por alguna pregunta que no he hecho, por ejemplo?
¿Le he preguntado por cuál será el siguiente paso del proceso y si me avisarán?
¿Qué sensación final de la entrevista tengo?
¿Ha dado algún mensaje, positivo o no el entrevistador?
Podrían ser más. Pero es un buen compendio.
Posteriormente, habría que hacer un listado de los puntos débiles o errores surgidos de la entrevista para trabajarlos para la siguiente. Puede parecer una tarea ardua, pero, en 30 minutos, el tiempo de volver a casa, se puede. Hay que plantearse, una vez hecho el análisis, cómo corregir los errores realizados, para poder hacerlo mejor en la siguiente.
En próximos posts, iré tratando algunos de los temas aquí mencionados,
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Hola francesc!
Antes que nada te felicito por tu página, es muy instructiva para aspirantes a empleos.
Te contaré una experiencia personal pero más allá de eso quiero saber si te ha sucedido o has escuchado un caso similar
Hace un mes me postulé a un cargo como gerente de marketing en una multinacional aquí en Chile, pase todos los filtros y la última entrevista fue con el director de la empresa en Un café, fue muy cómoda y hubo buen relacionamiento.
Todo parecía bien, le pregunte a la analista de talento humano quien tomaría la decisión final para elegir al candidato y me dijo que era una decisión conjunta entre todos los que me entrevistaron, me sentía seguro y optimista en que la decisión sería a mi favor.
Hace dos semanas me llego un mail donde me descartaban y era una carta de agradecimiento por haber participado en el proceso, sentí algo de rabia, pero luego ya me calme y decidí seguir buscando empleo
Lo increíble del caso es que el lunes me llamaron de la misma empresa donde una semana atras me habían descartado y me dijeron que si aún me interesaba el cargo y les dije que si, y me comentó quien me llamó que habian decidido que me contratarían a mi. Yo no comente nada sobre el mail que me había llegado. El viernes pasado firme el contrato.
Te has topado con casos similares Francesc? Donde te descartan y luego te llaman para contratarte? A mi me pareció muy inusual.
Gracias por tu atención!
Hola Marcos. Muchas gracias por tus palabras sobre el blog.
Sí que es habitual o posible el caso que comentas. Lo más probable es que el candidato seleccionado primeramente no este ahora interesado o que haya sido descartado finalmente por algún motivo.
Otro motivo podría ser un error en la comunicación, pero no es tan habitual. Seguramente es lo primero.
Es posible que te acabes enterando qué ha pasado.
¡Un saludo y que te vaya bien en el nuevo trabajo!
Me sentí incómoda de entrada cuando la entrevistadora no me saludo con la mano o un beso, un simple gesto . Que debería haber hecho yo ? Tomar la iniciativa y haber saludado? Al fin de la entrevista fue igual aunque le agradecí la oportunidad . Estoy a la espera
Buenos días Paola.
En una entrevista, marca el tiempo y los pasos la persona que entrevista. Está bien estar a la espera y bien atento para actuar de forma adecuada.
No todo el mundo da la mano. A veces con un «buen día», hay suficiente.
Un saludo.